Si ya dispones de ventanas de aluminio o PVC en Toledo estás disfrutando del control eficaz y la seguridad energética que requiere tu vivienda.

¿Pero qué sucede si la energía para nuestro confort se escapa al exterior? La eficiencia energética es producto de actuaciones adecuadas y la suma de varios factores, incluyendo nuestros hábitos de consumo, las características físicas de los hogares y, especialmente, los cerramientos.

Mediante técnicas de carpintería de aluminio o PVC podemos disponer de la energía necesaria, controlando y reduciendo al mismo tiempo el consumo. Se denominan “medidas activas” y son el resultado de combinar eficacia y seguridad para obtener mayor rendimiento con menos recursos.

Las protecciones en las ventanas y balcones son de vital importancia en el cerramiento de la vivienda. Estimando que la envolvente del edificio retenga la climatización del aire a la temperatura idónea, el calor o el frío atraviesan los cerramientos de dos modos distintos:

Mediante conducción. O mejor dicho, mediante el coeficiente de conductividad, el cuál transmite calor por los elementos sólidos. Dependiendo del espesor y calidad de los materiales, de su degradación o su vulnerabilidad a la humedad, podemos saber dónde se pierde más calor y compensar pérdidas. La solución está en el nivel térmico de aislamiento.

Mediante convección. En este caso la circulación externa de aire se lleva el caudal de energía interior fuera de nuestro hogar, debido a que las envolventes y los cerramientos no disponen de la calidad y seguridad adecuadas. No son estancas y se producen filtraciones.

Eficiencia y seguridad energéticas dependen, sobre todo, de una buena ejecución de carpintería. De poco sirven medidas activas o pasivas sin que los materiales y el ensamblaje de cerramientos y aislantes térmicos no sean los correctos. 

En Hermanos López Navarro somos especialistas aportando soluciones en ventanas de aluminio o PVC en Toledo. ¿Hablamos?